1. En el dormitorio, coloca un mural fotográfico
¿Un paisaje idílico? ¿Las vistas desde tu hotel preferido? Por su calidad y realismo, poner un mural fotográfico en una de las paredes es uno de los mejores recursos para cambiar el look de tu dormitorio, sin obras y a un coste reducido.
2. En los estantes, apúntate a la moda de las plantas colgantes
Helechos, potos, hiedras: utilízalas para vestir cualquier rincón, en un estante o colgadas del techo, de tu salón, comedor, cocina, dormitorio o despacho.
Naturalidad y frescura con un sencillo gesto.
3. En el salón, cuelga una composición de cuadros y láminas
Utiliza un cable tensor y unas pinzas cromadas o doradas para colgarlos. Emplea distintos puntos de sujeción, si el cable o el cordón es muy largo: conseguirás una estructura más fuerte y tensa.
4. En la zona de lectura, diseña un revistero original
Introduce elementos decorativos hechos por ti, como un divertido revistero donde almacenar periódicos y revistas. ¿Materiales? Solo necesitas dos cinturones y una estructura para sujetarlos. Llega el frío y nada mejor que estar en casa a refugio leyendo.
5. En el baño, cuelga una cortina de ducha con motivos geométricos
Sustituye tu antigua cortina de ducha por una de motivos geométricos. Opta por tonos negros, grises o marrones, si te gustan los baños sobrios.
6. En el comedor, quita las puertas de los armarios empotrados y luce la vajilla
Puedes forrar el fondo con diferentes papeles pintados y dejar tus vajillas bonitas a la vista.
7. En el dormitorio infantil, pinta una pared de pizarra
El perfecto espacio para que los niños desarrollen su lado más creativo, anoten sus tareas y estén entretenidos. ¡Cada día algo diferente!
8. En el despacho, pon un panel organizativo
Disfruta de una zona de trabajo más ordenada con un recorte metálico agujereado o una pequeña estructura de mallazo de obra anclada a la pared.
Utilízalo también para colocar fotografías, postales o tarjetas de visita con un sencillo imán, una pinza o unas tachuelas.
9. En el patio, la terraza o el balcón, una silla de mimbre
A medida que los días se hacen más cortos, toca valorar más y mejor la luz natural. Nada mejor que una humilde silla de mimbre, material sostenible y natural, para disfrutar del sol.