Joan Llongueras, socio fundador de Coblonal Arquitectura –estudio que dirige junto con Jordi Mercè– vive aquí con su mujer e hijos desde hace 10 años. Acaba de reformar la casa por completo para iniciar una nueva etapa.

La vivienda, situada en la zona de la Sagrada Familia, es una construcción entre medianeras. “La casa es estrecha, pero su desarrollo vertical y la altura de los techos me ha permitido crear nuevos espacios intermedios. La planta baja, por ejemplo, tenía cuatro metros de altura y he podido hacer un semisótano nuevo”, explica. De esta forma, Joan Llongueras ha creado no un dúplex ni un tríplex, sino nada más y nada menos que un “quíntuplex”, como él dice.

En el recibidor, llama la atención la pared revestida con papel pintado, que oculta las puertas de las habitaciones. “He elegido la imagen de un bosque para darle frescura a la parte más oscura de la casa”, señala.

La casa ha cambiado mucho desde que la pareja la compró hace 10 años. En realidad, ha ido evolucionando con la familia. “Originariamente, la planta baja era una tienda de utensilios de cocina totalmente abandonada y la planta primera reunía tres habitaciones: cocina, salón-comedor y baño. La planta superior estaba destinada a trastero y lavandería”, explica Joan.

El recibidor da una idea del estilo decorativo general de la vivienda. A la derecha, la escalera realizada con chapa de hierro es el hilo conductor de la casa. El hierro es uno de los materiales que Joan ha utilizado en el proyecto.