Este piso plantea una reforma cuidada y funcional con un presupuesto contenido. Nos ha interesado especialmente porque se trata de una rehabilitación de libro para personas que estén pensando, como en este caso, en darle salida a una vivienda anticuada. Charlamos con el equipo de Lautoka Urbana, encargado del proyecto, sobre las claves de una reforma que cumple a rajatabla la regla de las tres B: bueno, bonito y barato.

De un vistazo

Quién vive aquí: Una pareja

Situación: Barcelona

Superficie: 60 metros cuadrados

Presupuesto: 70.000 euros

Proyecto: Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de Espacios

El punto de partida era conseguir adaptar este antiguo piso a un modo de vida más práctico y contemporáneo. Para ello, había que repensar los espacios y renovar los acabados: un lavado de cara imprescindible antes de poner la casa en venta.

“Cuando comenzamos el proyecto, nos encontramos una vivienda que llevaba al menos 50 años sin tocarse. Como se iba a vender o alquilar tras su reforma, el requerimiento del cliente fue que el piso tuviese una apariencia más moderna”, cuenta el equipo de Lautoka Urbana. Unificar tanto estancias como materiales ha sido la clave de la reforma. De este modo, se consigue aportar mayor amplitud visual al espacio.

ANTES: La vivienda original contaba con dos habitaciones, un salón, una cocina, un aseo en la entrada y un baño para las habitaciones, además de un pequeño trastero. Los espacios eran pequeños y su mala distribución dejaba mucho espacio para el vestíbulo y un intricado e innecesario pasillo en una vivienda de tan reducidas dimensiones.

Cómo estaba el piso antes
Cómo estaba el piso antes | Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de espacios

Según los arquitectos, “el propietario quería una vivienda con dos suites con baño y un armario, una cocina abierta al salón y un espacio de lavado dentro de un presupuesto ajustado”.

DESPUÉS: El hall de entrada, la cocina y el salón forman ahora un único espacio. Se han limpiado las visuales, eliminando tabiques y puertas. La casa, ahora, cuenta con mucha luz natural. La nueva zona de día se convierte así en un espacio multifuncional, cómodo y práctico, donde reunirse, cocinar o ver la televisión. El resto del espacio lo ocupan dos dormitorios y un generoso baño.

Los arquitectos han diseñado una cocina a medida en la que los electrodomésticos se visualizasen como parte del mobiliario del salón-comedor. “Los electrodomésticos se plantearon integrados para que no se vieran desde el salón. La campana extractora quedó camuflada en los armarios altos de la cocina, resueltos sin tirador”, cuentan desde Lautoka.

Cocina reformada
Cocina reformada | Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de espacios

Como decíamos, una de las principales desventajas en esta vivienda era la falta de espacio, “No sabíamos dónde podíamos ubicar un armario o la nevera, ni tampoco las escobas. Para ello, fuimos robando espacio sobrante de los baños”, cuentan los proyectistas. De esta manera, consiguieron camuflar en el espacio de la entrada un armario ropero y el frigorífico, ganándoselo al baño de detrás, que no lo necesita.

La lavadora y un armario para la limpieza y la ropa de casa también encuentran de esta manera su ubicación ideal en el pequeño distribuidor de acceso a los dormitorios, sin consumir espacio adicional y aprovechando las instalaciones de fontanería del baño.

En la cocina también hubo que exprimir al máximo el espacio. Así, la encimera se prolonga en una pequeña barra que hace de zona de comedor. El resultado es una cocina compacta y completa perfecta para varias personas.

Cambiar los baños de lugar fue un reto. “Las bajantes estaban ubicadas en el patio de luces y eso dificultaba la condición del cliente de contar con dos suites con baño”, explican los arquitectos.

Baño reformado
Baño reformado | Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de espacios

Para resolver la nueva instalación, se planteó un doble tabique para acoplar el desagüe y se instaló un sanitario suspendido que facilita dar mayor pendiente a la bajante. El doble tabique se aprovechó para colocar una pequeña repisa en el baño y para crear en el dormitorio un nicho que hace de cabecero y mesilla.

La cuidada selección de materiales también ha sido clave. Desde el principio, se buscó conseguir una vivienda práctica y neutra, pero con la suficiente calidad y calidez para que resultase atractiva.

Como el presupuesto era contenido, se redujeron costes en algunas partidas en favor de otras más importantes, como el pavimento, en el que se invirtió en un suelo de madera natural que aporta continuidad y confort a la vivienda. “Los muebles bajos de la cocina, en cambio, se proyectaron en un material más asequible, como la melamina. Pero para el resto de los elementos intentamos utilizar materiales nobles en casi todos los acabados. El frontal y la encimera de la cocina son de Silestone”, explican los proyectistas.

El salón antes de la reforma
El salón antes de la reforma | Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de espacios

ANTES: Maderas y textiles oscuros y elementos decorativos anticuados restaban valor a la vivienda y ocultaban su potencial.

Para reducir costes, se decidió prescindir de algunas partidas, como la calefacción, que se sustituyó por un sistema con bomba de calor, más económico. “Con lo ahorrado hemos hecho armarios a medida para la entrada y el distribuidor en los que se integran los electrodomésticos”, puntualizan desde Lautoka.

En el caso de los baños, se recurrió a alicatados con porcelánicos rectificados de gran formato para darle resistencia y durabilidad. El mueble bajo encimera es de melamina.

Jugar con los espacios
Jugar con los espacios | Lautoka Urbana - Reformas y Diseño de espacios

Para el mobiliario, tampoco se podía recurrir a piezas excesivamente caras. Se optó por un sofá y un sillón de corte clásico, pero minimalista, y una mezcla de elementos decorativos de diferentes tiendas. “El mueble de la TV, por ejemplo, es una pieza de IKEA que nuestro carpintero logró suspender de la pared para, así, poder eliminar las patas”, explican desde el estudio.

Además, se buscó potenciar elementos preexistentes en la casa. Se rescataron tanto el muro de ladrillo existente como parte del antiguo forjado de bovedillas cerámicas. “La pared medianera, se limpió del yeso que la cubría, se vaciaron las juntas y se limpió el ladrillo hasta dejarlo completamente libre de materiales. En el caso de las bovedillas, se limpiaron de los cascotes y rastreles de madera que aguantaban el techo original y luego se repasaron las juntas y se parchearon las piezas de ladrillo rotas con una mezcla de mortero y ladrillo picado para igualar el color”.

“La iluminación era un punto clave dentro de la reforma para conseguir darle más amplitud al piso, ya que el ladrillo visto comía espacio visual debido a su carga cromática. Para ello, se potenció el cajón del techo de la cocina y se aprovechó para iluminar el ladrillo mediante una fosa de luz que le da una profundidad muy interesante”, explican desde Lautoka.

En la cocina, la zona de la barra se iluminó con unas lámparas colgantes que dan una luz más tenue y directa a la zona de comidas. En la zona de preparación, en cambio, los armarios altos cuentan con una luz integrada en su parte inferior para iluminar la zona de trabajo.

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